¿Qué viene el coco! Es socialista y se hace llamar José Luis Rodríguez Zapatero. Aún no ha sido nombrado presidente del gobierno español pero algunos medios ya lo ven como un terrible ogro que "
aboga por la revolución social y sexual" (sic), en palabras de la redactora Elaine Sciolino. En un artículo publicado en el
New York Times y en el Nuevo Herald que no tiene desperdicio se retrata una España en la que la prostitución es legal, Barcelona no es popular por albergar el Fórum de las Culturas o por su cosmopolitismo, sino por ser "
una de las líderes europeas en la industria pornográfica" (¿toda la ciudad?), que
encima alberga un festival erótico de cine. Y si el retrato de Sodoma y Gomorra, quiero decir, España, no es completo, la autora añade sentencias como que "
el uso de drogas por individuos en la privacidad de sus casas es tolerado" (sic) y "
la comunidad homosexual de España es vibrante, excéntrica y políticamente activa" (¿eran críticas o virtudes?).
Desconozco qué trabajo de campo realizó la redactora para llegar a tales conclusiones y confío que no realizara su labor bajo los efectos de alguno de esos estupefacientes tolerados en las casas españolas (¿?). Porque si a ella le resulta extraño que Zapatero quiera una "
nueva y valerosa España", que "
será moderna, cultura y tolerante" a mí me chocan aún más frases del tipo "
España, como la octava economía más grande del mundo y creciendo más rápidamente que muchas otras en la Unión Europea, ya se encuentra entre los países más cultos, tolerantes y socialmente liberales. Después de todo, este es el país que produjo al cineasta liberal Pedro Almodóvar". No hace falta más que consultar los índices de lectura de libros o las estadísticas de consulta de periódicos para comprobar lo cultos que somos (mientras un 77,8% de finlandeses lee la prensa de 5 a 7 veces por semana, sólo un 24,8% de españoles la lee con similar periodicidad y un 23% no lee nunca. Datos del Eurobarómetro:
European citizens and the media, de mayo de 2003). Y para conocer el grado de tolerancia de la población española no hay más que echar un vistazo a los
Barómetros de opinión del CIS: la inmigración es considerada uno de los principales problemas del país (por un 15,2% de encuestados), muy por delante del racismo (un 0,6%).
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