9 de agosto de 2004

Vídeo falso en Irak

¿Qué puede hacer un joven de 22 años, programador de videojuegos y usuario de Internet con mucho tiempo libre? Ir al cine a ver la última de Catwoman, salir con los amigos/as, irse de vacaciones. Se me ocurren muchas otras opciones que mejor no escribiré aquí. Pero no, un tal Benjamin Vanderford no tenía suficiente y decidió grabar en video su propia decapitación. Falsa, claro está. Aunque, la verdad, si hubiera sido real no habría sido una gran pérdida para la ciencia (aquí me pasé). Hace tres meses la colgó en Internet en redes P2P, alguien la encontró interesante y la incluyó en una página web.

A partir de aquí la historia es conocida: varias agencias de noticias dan el video por bueno y publican la noticia sobre una nueva decapitación en Irak. Algunos medios informan de ello, otros dudan de su veracidad. Y finalmente se desvela que era totalmente falso.

Una vez se descubre todo el pastel, Vanderford sale de nuevo por la televisión explicando que lo había hecho para demostrar lo fácil que es difundir un vídeo falso y lo crédulos que son los medios. Vale, se acepta pulpo como animal de compañía ;-).

Tras haber dejado a los autores de la campaña de marketing del Proyecto de la Bruja de Blair como meros aficionados, no me extrañaría dentro de poco ver a Vanderford dirigir una película en Hollywood o realizar la campaña publicitaria de algún partido político o producto de gran consumo. Si es que este mundo está loco.


Nota: Investigar qué es eso de que Vanderford negó ser "un androide" que comentan en este weblog.
Un titular realmente bueno que leí por ahí "Vanderford realmente perdió la cabeza"

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